Una rosa para Soler

Largometraje documental.

Directora: Arantxa Aguirre.

Poético ejercicio de investigación sobre la vida a penas registrada del Padre Antonio Soler, prolífico compositor catalán del siglo XVIII.


En 1735, un niño de seis años abandona su pueblo de Olot para ingresar en la Escolanía del Monasterio de Montserrat. A partir de ese momento, la música va a ser su familia y su razón de ser. Ya adulto, fraile en el Monasterio de El Escorial, Antonio Soler compondrá uno de los corpus más nutridos y asombrosos de la historia de la música española.

En nuestro siglo XXI, la pianista Rosa Torres-Pardo se interesa en la obra de Soler y comienza a buscar por todo el mundo sus partituras perdidas. La aventura culmina en la primera grabación de unos deslumbrantes Quintetos junto al Cuarteto Bretón. A partir de ahí, con Rosa como hilo conductor, los acontecimientos se suceden vertiginosamente: la Compañía Nacional de Danza estrena tres sonatas de Soler coreografiadas por José Carlos Martínez y bailadas por Lucía Lacarra. Poco después, la cantaora Rocío Márquez lleva a cabo una versión de la obra más conocida de Soler: el fandango, que en nuestra película tenemos el privilegio de escuchar asimismo en su versión original a cargo del clavecinista Nicolau de Figueiredo y en una transcipción para guitarra interpretada por Alfredo Lagos.

La transmisión de la mejor tradición es a veces obra de una chispa que prende en el corazón de los artistas, que necesitan arder para estar vivos. Nuestro documental recoge esta espontánea recuperación de un hombre que, desde una celda helada de El Escorial, nos regaló una de las obras más luminosas de la tradición musical española.